Cómo elegir un autoclave para peluquería o barbería

 Aunque los tratamientos que se brindan en una peluquería o en una barbería pueden parecer ser poco intrusivos para nuestro cuerpo, llevarlos a cabo con herramientas sin esterilizar puede representar un grave peligro.



En peluquerías y barberías, al igual que en centros de estética y belleza, se utilizan herramientas como cuchillas y tijeras metálicas reutilizables que pueden producir pequeños cortes en la piel de nuestros clientes. Esta ruptura del tejido implica un potencial riesgo de contagio de enfermedades.

Por este motivo, muchos operadores de estos establecimientos están tomando conciencia sobre los peligros de ofrecer servicios de salón sin prácticas de esterilización adecuadas y el uso del autoclave se ha difundido de gran manera, ya que permite proporcionar el más alto nivel de seguridad e higiene.

¿Por qué es necesario un autoclave en una peluquería o barbería?

Los microbios y las bacterias en las tijeras y cuchillas no se pueden limpiar simplemente con agua y detergente. Requieren un cuidado especial ya que los microorganismos y las bacterias son altamente resistentes a estos intentos frívolos de limpieza.

Si utilizamos instrumentos sin esterilizar, incluso durante procedimientos simples, pueden ocurrir pequeñas roturas en el tejido de nuestros clientes, que significan un riesgo de infección con microbios.

Algunas peluquerías y barberías utilizan diferentes tipos de equipos para esterilizar sus herramientas y piezas de mano, como cajas esterilizadoras de luz UV, barbicida y otras soluciones químicas. Aunque estas herramientas son legales, ninguna de ellas se acerca al rendimiento de un autoclave, que se convierte en la mejor (y única) solución para esterilizar instrumentos de salón.

¿Qué tipo de autoclave se utiliza en una peluquería o barbería?

Existen diferentes tipos de autoclaves. Los del tipo N son los más básicos y los del tipo B, los más avanzados. Mientras que, los autoclaves tipo S son una variedad intermedia.

El autoclave para peluquería es a menudo el autoclave de la clase N, que sirve para esterilizar materiales simple. Por ejemplo, productos sólidos desnudos (sin embolsar). En la mayoría de los casos, un autoclave de estas características es suficiente para las necesidades de una peluquería o barbería.

En caso de que las necesidades sean mayores, se puede recurrir a un autoclave Clase S, que puede esterilizar objetos porosos, huecos y macizos. Y cada vez es más común que se utilicen autoclaves de clase B, comúnmente conocidos como “autoclaves médicos”, que son los más avanzados del mercado y que no tienen limitaciones para esterilizar todo tipo de instrumentos.

¿Cuáles son las infecciones más comunes que se pueden transmitir?

De no utilizar herramientas esterilizadas, nuestros clientes están expuestos a las siguientes infecciones:

  • *infecciones virales: virus de la hepatitis B, virus de la hepatitis C, virus del papiloma humano VPH, virus del VIH
  • *bacterianas: principalmente estafilococos y estreptococos
  • *fúngicas: Pityrosporum ovale, Candida sp., Epidermophyton sp.
  • *parasitarias

Esterilizadores UV para peluquerías


La esterilización por rayos ultravioleta desinfecta alterando el componente de los microorganismos e impidiendo su reproducción. Se trata de un medio no-químico que inactiva virus, bacterias, esporas, protozoos y levaduras.

Si bien el rendimiento de este tipo de equipos es notablemente inferior al de un autoclave, su uso se encuentra ampliamente difundido en centros de estética, estudios de tatuaje y peluquerías, ya que su precio es significativamente inferior.

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